Cuando <span style="color: #ff6600"><strong>Albert Einstein</strong></span> conoció a <span style="color: #ff6600"><strong>Charles Chaplin</strong></span> le dijo: «Lo que más admiro de su arte es que usted no dice una palabra y sin embargo todo el mundo lo entiende».
Chaplin le respondió: «Cierto, pero su gloria es aún mayor; el mundo entero lo admira cuando nadie entiende una palabra de lo que dice».
Si utilizas un lenguaje rebuscado para tratar de impresionar a los demás, no podrás crear lazos con ellos. La persona simplemente esperará a que la tortura termine.
Los buenos comunicadores simplifican las ideas complejas y aclaran los temas.
El escritor John Beckley observa en su libro <span style="color: #ff6600;"><strong>El poder de las palabras simples</strong></span>: «En la educación, no suele ponerse el énfasis en comunicar ideas de manera simple y clara. En cambio, se nos alienta a usar palabras y estructuras sintácticas más complejas para hacer alarde de nuestros conocimientos y de nuestra formación. En lugar de enseñarnos a transmitir ideas de la manera más clara posible, nuestra educación nos enseña a empañar las cosas. Hasta nos inculca el miedo de que si no hacemos que nuestra escritura sea lo suficientemente complicada, se nos considerará incultos».
Lograr que las cosas sean sencillas es una destreza, y es necesario si deseas crear un vínculo con las personas cuando te comunicas con ellas. Algunos criterios que enriquecerán el mensaje que deseas comunicar:
⦿ Humor: algo que haga reír a la persona;
⦿ Sentimientos: algo que logre cautivar sus emociones;
⦿ Esperanza: algo que lo inspire; y
⦿ Ayuda: algo que le sirva de manera tangible.
Aplica la estrategia 3’s para comunicar tu mensaje: Hazlo Simple. Dilo Sin prisa. Esboza una Sonrisa.
Para relacionarte con las personas en diferentes situaciones: Esfuérzate por simplificar el mensaje. Cuanto más grande sea el grupo, más sencilla debe ser la comunicación.
Para relacionarte con una sola persona: Suele ser bastante sencillo porque puedes adaptar tu mensaje con precisión según su personalidad, experiencia e inteligencia. Además puedes contestar cualquier pregunta que tenga. Mientras mejor te entienda, mayores posibilidades tendrás de establecer un vínculo.
Para relacionarte con un grupo: Debes lograr que tus ideas sean útiles a más de una persona; para corroborarlo solicita comentarios, pídeles que te digan lo que aprendieron, pregúntales como transmitirán el mensaje.
Para relacionarte con un auditorio: ¿Qué es lo estrictamente necesario que debo comunicar para que el público entienda el punto? ¿Cómo puedo lograr que estos pocos puntos esenciales sean memorables?
Para comunicar, primero practica con una sola persona; si funciona bien, inténtalo con un grupo pequeño y después con las masas.
AUTOR: Víctor Suárez
FUENTE: Foro Económico Mundial