La forma en la que inicias tu día establece el contexto y tu mentalidad para el resto del día. Aun así, mucha gente comienza procrastinando ignorando la alarma, diciéndole a su subconsciente que no tiene la disciplina para levantarse y menos lo necesario para ser felices y exitosos.
Cuando la alarma de tu despertador suene, considéralo como el primer regalo que la vida te está dando. Es el regalo del tiempo que debes aprovechar para convertirte en la persona que deseas y para tener la vida que quieres trabajando en dirección a tus metas y sueños, mientras que el resto del mundo está dormido. Si no fuera por la siguiente estrategia, seguiría dormitando en mi cama cada mañana y diciéndome que no soy una persona madrugadora.
¿Cómo puedes motivarte para madrugar y crear un día extraordinario cuando tu nivel de motivación está entre el 1 y 2 de una escala entre el 1 y el 10? Sigue esta simple estrategia de cinco pasos y no tendrás excusas para no ser un madrugador.
Paso 1: Establece tus intenciones antes de acostarte. Tu primer pensamiento en la mañana puede ser el mismo que el último que tuviste al acostarte. Muchas personas tienen noches, ya sea en Navidad o antes de unas vacaciones, en las que no pueden dormirse porque están muy emocionadas por el día siguiente. Tan pronto como la alarma suena, abren sus ojos con entusiasmo y se levantan como resorte para iniciar su día.
Por otro lado, si tu última idea antes de dormirte fue algo como «no puedo creer que me tenga que levantar en seis horas, voy a estar muy cansado», entonces tu primer pensamiento cuando la alarma suene será «¿ya pasaron seis horas?, ¡quiero seguir durmiendo!».
Así que la clave es decidir conscientemente las intenciones del día siguiente cada noche para que mental y activamente puedas crear una expectativa positiva para el día de mañana.
Paso 2: Mueve tu despertador al otro lado del cuarto. Si todavía no lo haces, muévelo tan lejos de la cama como puedas. Esto te forzará a levantarte y moverte. Eso me da energía. Si dejas el despertador cerca de tu brazo, vas a apagarlo y volverás a dormirte.
Paso 3: Lávate los dientes. Dale a tu cuerpo tiempo para despertarse. Después de apagar la alarma, dirígete al baño, lávate los dientes y la cara con agua fría o caliente. Estas simples actividades pueden aumentar tu nivel de motivación.
Paso 4: Bebe un vaso de agua. Esto es importante. Después de seis u ocho horas dormido sin agua, tal vez te sientas algo deshidratado, lo cual puede provocar fatiga. Muchas veces cuando la gente se siente cansada lo que necesita es un poco de agua, no más horas de sueño.
Paso 5: Vístete con tu ropa para hacer ejercicio. Así estarás listo para salir de tu habitación. Algunas personas prefieren iniciar su día entrando a la regadera, pero creo que deberíamos empezar haciendo algo de ejercicio.
AUTOR: Hal Elrod
FUENTE: Entrepreneur